La provincia de Santa Fe registró 32 víctimas de femicidios en los primeros 11 meses de 2024, según un informe de la organización Mujeres de la Matria Latinoamericana (Mumalá). Este estudio, realizado en el marco del 25 de noviembre, Día Internacional de la Lucha contra la Violencia de Género, revela datos desgarradores que exigen atención inmediata.
Datos geográficos: Rosario y Santa Fe, los focos principales
De las víctimas, el 67% residían en Rosario y su área metropolitana, mientras que el 17% vivían en Santa Fe y Gran Santa Fe. Además, un 8% correspondía a localidades del norte y otro 8% al sur provincial. Esta distribución muestra cómo la violencia de género impacta con mayor fuerza en los centros urbanos.
El vínculo con el agresor: patrones preocupantes
El informe detalla que el 50% de las mujeres asesinadas tenían como agresor a su pareja o expareja, y un 34% a un familiar. En los casos vinculados a la narcocriminalidad, el 100% de los crímenes fueron perpetrados por desconocidos bajo modalidades como el sicariato. Este fenómeno destaca cómo la violencia de género se entrelaza con dinámicas criminales más amplias.
Las armas utilizadas: una tendencia alarmante
El 50% de los femicidios fueron cometidos con arma blanca, mientras que un 16% se perpetró con armas de fuego. En contraste, los femicidios relacionados con la narcocriminalidad fueron ejecutados exclusivamente con armas de fuego, evidenciando la brutalidad y premeditación de estos actos.
Impacto en la niñez: las víctimas colaterales
Un aspecto devastador de estos crímenes es el impacto en los niños y adolescentes. Según Mumalá, al menos 13 menores quedaron huérfanos debido a estos femicidios, aunque el número real podría ser mayor, dado que en muchos casos no se reporta la condición de maternidad de las víctimas.
Denuncias previas: un indicador crítico
Solo el 17% de las víctimas había denunciado previamente a su agresor. Este dato evidencia las barreras estructurales y culturales que enfrentan las mujeres para acceder a la justicia y obtener protección.
Reflexión y acción urgente
Los datos presentados por Mumalá no solo reflejan la magnitud del problema, sino también la necesidad de políticas públicas integrales que aborden la prevención, atención y erradicación de la violencia de género. Este informe debe servir como un llamado a la acción para garantizar un futuro libre de violencia para todas las mujeres en Santa Fe.
Comentar sobre esta publicación