La ola de calor y las altas temperaturas en la región de Santa Fe fomentan la aparición de palometas en las costas del río Paraná. Este fenómeno está relacionado con el comportamiento alterado de estos peces cuando sube la temperatura y baja el nivel del agua, según explicaron especialistas del Acuario del Río Paraná. ¿Qué debes saber sobre estas especies y cómo evitar ataques? Te lo contamos a continuación.
¿Qué son las palometas?
Las palometas son peces carívoros que habitan en el río Paraná durante todo el año, pero su actividad aumenta considerablemente en los meses de altas temperaturas. Existen tres especies principales:
Palometa brava (Serrasalmus maculatus)
- Características: Cuerpo comprimido y elevado, escamas pequeñas.
- Hábitos: Suelen moverse en grupos de hasta 20 ejemplares, principalmente durante el día.
- Dieta: Peces (preferencia por aletas), crustáceos y larvas de insectos.
- Tamaño: Hasta 26 cm de longitud y 420 gramos de peso.
- Coloración: Fondo gris iridiscente y vientre amarillento.
Palometa picuda (Serrasalmus marginatus)
- Características: Hocico punteagudo, cuerpo comprimido y escamas brillantes.
- Dieta: Peces moribundos o muertos, con tendencia a mordisquear aletas.
- Tamaño: Hasta 25 cm de longitud.
- Coloración: Gris amarillento con escamas abrillantadas.
Palometa mora (Pygocentrus nattereri)
- Características: Cabeza grande, hendidura en la frente, dientes visibles.
- Dieta: Carnívora, consume carroña y peces vivos en condiciones adversas.
- Tamaño: Hasta 27 cm de longitud.
- Coloración: Gris violáceo con vientre amarillento y aleta caudal con banda negra.
¿Por qué atacan las palometas en verano?
El comportamiento agresivo de las palometas está influenciado por varios factores:
- Altas temperaturas: Los peces, al ser poiquilotermos, aumentan su actividad metabólica con la temperatura del agua, lo que los vuelve más voraces.
- Bajo nivel del río: Disminuye el alimento natural disponible, incrementando su agresividad.
- Proximidad a nidos: Durante la reproducción, las palometas son más propensas a atacar para proteger su territorio.
- Zonas con restos orgánicos: Lugares donde se arrojan restos de pescados o carnadas atraen a estas especies.
Mitos sobre las palometas
Aunque las palometas tienen una reputación temible, es importante desmitificar algunas creencias:
- No son depredadores de humanos: No existen pruebas de que puedan matar personas, ni siquiera en regiones como el Amazonas.
- Ataques menos graves de lo esperado: Las mordeduras suelen causar heridas superficiales, aunque pueden ser dolorosas.
Recomendaciones para evitar ataques de palometas
Para minimizar riesgos al disfrutar del río Paraná, sigue estas recomendaciones:
- Evita zonas de aguas quietas y playas donde la temperatura del agua sea elevada.
- No te bañes cerca de cebaderos o restos de carnadas arrojadas por pescadores.
- No ingreses al agua con heridas abiertas, ya que pueden atraer a las palometas.
- Respeta las banderas y advertencias colocadas por los guardavidas.
Cómo actuar ante un ataque de palometas
Si llegas a sufrir una mordedura, actúa de inmediato siguiendo estos pasos:
- Lava la herida con agua y jabón neutro para evitar infecciones.
- Aplica presión directa sobre la herida para detener el sangrado.
- Evita hacer torniquetes.
- Coloca un vendaje compresivo si es necesario.
- Contacta al sistema de emergencias para recibir atención médica adecuada.
El rol ecológico de las palometas
Pese a su reputación, las palometas desempeñan una función esencial en el ecosistema del río Paraná. Al alimentarse de peces moribundos o enfermos, contribuyen a mantener la salud de las poblaciones acuáticas, permitiendo la supervivencia de los ejemplares más fuertes y sanos.
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